dissabte, d’agost 21, 2010

730 Segun aitona.

Mientras terminábamos de arreglar las tablas, el aitona de Segun, de 88 años, se interesó por ellas y me hizo varias preguntas. Se quedó meditabundo un rato. Me gustaría saber qué le pasaba por la cabeza en ese momento.